Esta muestra constituye un acontecimiento inédito al ofrecer la posibilidad de contemplar 46 de las mejores piezas de la colección de escultura clásica de Dresde junto a otras 20 importantes esculturas clásicas del Museo del Prado. Ambos conjuntos escultóricos son fruto del coleccionismo barroco y neoclásico y en los dos se integran magníficas versiones romanas de obras griegas clásicas y helenísticas, además de muchos originales griegos con policromía antigua y un núcleo excepcional de retratos.
El Taller se encargó del diseño expositivo así como del mobiliario de la tienda de la exposición.
Cliente: Museo Nacional del Prado.
Año: 2009.